

Los papás y las mamás “novatos” tienen mucho de qué preocuparse: asegurarse de que su bebé esté sano y feliz, reorganizar sus vidas según los horarios de sus hijos, perder horas de sueño, y descubrir qué hacer en una serie de situaciones nuevas.
Sin embargo, cuando se trata de la salud bucal de su hijo, hay mucha ayuda disponible. Todo comienza en The Practice, tu clínica dental, cuando nos traes por primera vez a tu peque.
De acuerdo con la recomendación más común de los pediatras el primer chequeo dental de un niño debe realizarse a los dos o tres años ya que, desafortunadamente, algunos niños desarrollan caries en una edad temprana. Estaremos atentos a las caries, pero esa es sólo una de las razones para una visita a nuestra clínica.
Igualmente importante es la revisión de las higiene oral del niño cuando es pequeño para marcar una buena pauta, también veremos los “hitos” del desarrollo buco dental, y hablaremos con él y con el papá y la mamá la importancia de una buena higiene bucal.
¿Cómo preparar esta primera visita al dentista?
Existe un principio básico: si estás nervioso por ir al dentista con tu hijo, él o ella también lo estará así que la mayor recomendación es trata de no estarlo o al menos de mostrarlo.
En general, durante esta visita, simplemente vamos a estar hablando, mirando y comprobando en su boca, y vamos a realizar evaluaciones de salud oral.
Es mejor explicarle al niño que va a suceder antes de llegar a la clínica, sin generar un drama. Incluso podemos crear algo de entusiasmo ayudándolos a prepararse para el «gran día». Cuando entres a la clínica, es una buena idea traer un juguete o cuento reconfortante, un bocadillo y un pañal extra o dos por si los necesitara. Si es posible, te recomendamos dejar a otros niños en el casa, por lo que podemos concentrarnos en esa primera visita- Del mismo modo, puedes completar los formularios con antelación para concentrarte en tu hijo, puede ahorrar tiempo y esfuerzo el día de la visita.
Durante la visita realizaremos un suave examen de la boca. Vamos a estar buscando signos tempranos de problemas dentales como la caries, y evaluar el riesgo de que el niño puede desarrollar la enfermedad en el futuro. A menudo, este tipo de evaluación de riesgos puede ayudarnos a prevenir, e incluso revertir, en las etapas tempranas de la caries dental, sin ninguna perforación.
Finalmente, discutiremos varias maneras de mantener la salud bucal de tu hijo en las mejores condiciones. Si se necesitan tratamientos (como una fluorización), explicaremos qué es y por qué los recomendamos al niño. También comprobaremos y daremos consejos sobre la limpieza y el cepillado de manera efectiva, y programaremos una visita de seguimiento según sea necesario.